jueves, 23 de abril de 2015

Reseña: Sombra de mi bien esquivo de Paulina Movsichoff (novela)- Carmen Ortiz


Paulina Movsichoff, además de talento tiene oficio, ambas virtudes son notorias si  nos introducimos en la lectura de su novela  Sombra de mi bien esquivo, que también nos descubre una abultada experiencia literaria como investigadora, poeta, cuentista y novelista.
            El título de su novela nos remite al poema de Sor Juana Inés de la Cruz. Como sabemos, esta notable escritora mejicana no fue simplemente una religiosa que vivió en el Siglo XVII (Siglo de Oro español) y que se destacó por su maravillosa erudición y sabiduría sino por ser, acaso, la primera feminista, que se enfrentó a la sociedad obtusa de su época y a la cerrazón clerical.
            Recordemos el soneto (barroco) de Sor Juana Inés de la Cruz, que recuerda el nombre de la novela.
Deténte, sombra de mi bien esquivo
Imagen del hechizo que más quiero,
bella ilusión por quien alegre muero,
dulce ficción por quien penosa vivo.

Si al imán de tus gracias, atractivo,
Sirve mi pecho de obediente acero,
¿para qué me enamoras lisonjero
si has de burlarme luego fugitivo?

Mas blasonar no puedo, satisfecha,
de que triunfa de mí tu tiranía:
que aunque dejas burlado el  lazo estrecho

que tu forma fantástica ceñía,
poco importa burlar brazos y pecho
si te labra prisión mi fantasía.

            Tenemos aquí, sin duda, la temática que inspiró a la novelista y que podríamos completar con la famosa primera estrofa de la redondilla de la autora mejicana:

Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.
 Reitero, estas temáticas (avanzadas y profanas para una monja) son las que junto con otros ítems sirven de eje a la novela de Paulina.
En  Sombra de mi bien esquivo detrás de la visión de una mujer con sus pasiones, sus amores, sus esperanzas y sus temores está flotando el tema desencadenante de miedos y desorientación que entraña el  insoportable dolor del exilio. Podríamos preguntarnos si Ludmila, la protagonista y a la vez narradora, estaría tan perdida en la maraña de sus sentimientos encontrados si no hubiese tenido que abandonar su país, su lugar de pertenencia, bajo el riesgo de perder la vida. Recordemos que para los antiguos griegos el mayor castigo era el exilio. Ludmila estaba exiliada en México pero deambuló por distintos países y, por momentos los recuerdos de su infancia y su adolescencia en su patria la volvían a una época placentera, sin compromisos, obligaciones, dudas y desazón y también con descontento pero por temas que no implicaban riesgo de vida.
 Con verdadera sagacidad y talento Paulina nos introduce en el primer capítulo narrado por una mujer casada y con una hija que esta enamorada de otro hombre y viaja a España donde fantasea con la cercanía y la pasión de él, con una técnica literaria donde se trata de un animal que se muerde la cola, en la mitología griega era una serpiente alada mordiéndose la cola en actitud de devorarse a sí misma. Del griego: Ouro/boros. Ouro= cola, Boros= alimento (devorar) o sea, es una técnica donde el principio y el final se unen, llamada también del eterno retorno. El caso más clásico es en Cien años de soledad. Además, no se trata de sólo de esa temática de la mujer casada insatisfecha, nos esperan otras sorpresas. Sólo después nos enteraremos de que habla desde su propio exilio en un país latinoamericano porque la novela es mucho más, se está contando también el desgarro de saber las torturas y desapariciones que padecen sus compatriotas argentinos, presos o desparecidos  por la última dictadura militar.
En la novela de Paulina escrita en primera persona, básicamente asistimos, muy de cerca, de los padecimientos, alegrías y esperanzas de una mujer, Ludmila, quien también nos habla de su niñez y de su adolescencia que  se desarrolla en una provincia argentina donde deberá gozar y sufrir y tolerar el enfrentamiento en su familia prejuiciosa, dentro de una sociedad cerrada y machista. Ella, trabajosamente,  buscará la independencia a través de su pasión: la literatura. Y, finalmente también dará rienda suelta a sus normales deseos sexuales juveniles.
 Luego la Facultad en la gran ciudad, Buenos Aires, terminarán de templar su carácter rebelde a los convencionalismos. Más tarde llegará el amor con un famoso escritor, Néstor, su casamiento y una hija, Camila.
Después los desgarrantes acontecimientos de la patria, de la dictadura argentina de la que tiene que huir y las noticias de los amigos desaparecidos ponen una cuota de amargura y de silencioso padecimiento ante la soledad del exilio y las noticias de los compañeros asesinados.
Y siempre esa marca del machismo reinante, también en los países en que les toca vivir, y su propio temor postergarán su ansia de convertirse en una escritora, pero al fin su vocación y su talento se impondrán ayudados por su psicoanalista Antonio, a quien seguirá hasta Europa.
 Antonio, seguirá siendo una obsesión para la misma protagonista que volcará en él la pasión que no pudo concretar en otros hombres. ¿Lo ama? No lo sabemos. ¿Llegará a concretar ese verdadero o irreal amor? La respuesta queda abierta para el lector.
La respuesta acaso esté en el título de la novela, en el poema de Sor Juana o en la opinión de cada lector.

sábado, 11 de abril de 2015

EL TAPIZ DE LAS HORAS, de Paulina Movsichoff- María Lyda Canoso


En este libro la autora celebra a la vida y sus atributos. Ya desde el título el poemario habla de un estado contemplativo. Cifra, en esa abstracción de los dibujos, el ulterior significado: una construcción que, en orden sucesivo, va avanzando con un dibujo de la pasión y del cuerpo en todos sus aspectos, aún registra con tierna claridad los gestos de Julita Zavala, detenida desaparecida desde 1979, su prima. (…) a tu hija le dejaste / un ramito de lavanda / y esa costumbre de llevarte la mano a la frente / para arreglarte el pelo (…)
Más allá de lo autorreferencial que, sostengo, es el sustrato de toda obra literaria, en este libro pueden encontrarse algunos ecos de su admirada Rosario Castellanos.
Libro de innegable sensualidad donde el instrumento de la pasión es el cuerpo:
El cuerpo como eje, la piel su textura, el límite pero a la vez la posibilidad de vincularse, el contacto con el otro. Aun el otro aparecerá en la inmaterialidad de la tan actual realidad virtual.
Precisamente en el poema TU PIEL, dice: “Y te voy creando tal como Eva creó a Adán / después de que comieran la manzana / y ya no pudieron recordar el paraíso / o como la alfarera que fabrica los cántaros / en los que verterá sus cereales secretos”.
De esa forma y como una alfarera, va torneando su cántaro - libro. Imágenes de la infancia, de su propia infancia. Con influencia proustiana registra la materialidad del recuerdo hasta lograr su más alto registro. Metafóricamente habla de la infancia de Antonio Esteban Agüero, y encontramos un bello poema que titula Bienes, dedicado a su hija Sol, a quien también dedica el libro, un manifiesto, un legado. (…) Te dejo esa pequeña lumbre / que me guía la mano en el poema / la espuma del deseo / para que lo guardes en tu pecho / como una memoria que ofreces al futuro. (…)
¿Qué es lo que contempla la autora, desde ese lugar de la escritura, su “Cuarto Propio”, tan a lo Virginia Woolf, donde se ha instalado para escribir? Un tapiz mexicano. Habla de horas de contemplación y de escritura.
Tapiz que, tal como un mandala, insiste en que debe existir una gran concentración en el acto de contemplar, y que es allí donde se instala para penetrar la esencia de las cosas hasta su última consecuencia, tal como la Pizarnik ante la rosa.
El dibujo lleva un orden como un orden lleva el poemario. El tapiz va repitiendo como acto propiciatorio dibujos y colores con una alternancia prefijada. Paulina alterna sus temas esenciales logrando un todo armónico.
Hay fondo y figura y eso avanza en su factura: de arriba abajo, de izquierda a derecha, tal como sucede en nuestra escritura occidental.
La estructura de este poemario es su urdimbre. Estos poemas avanzan en una construcción con hilos de colores que en su alternancia forman dibujos de eso que su memoria registra de un mundo poblado por imágenes y sensaciones y recuerdos y sueños, todo eso tan felisbertiano, si se me permite arriesgarlo (Tierras de la Memoria).
Por otra parte Paulina Movsichoff crea su propio linaje, escribe sobre escritores que por una u otra razón admira: Rosario Castellanos, Juan Gelman, Emily Dickinson, Olga Orozco, Sylvia Plath, Isak Dinesen, y otros que no salen retratados en este poemario. No es en vano que haya tomado a estos escritores como referentes homenajeados. Ellos integran su Olimpo particular, frecuenta sus lecturas, que a su vez son su fuente de inspiración. A ellos se adscribe, y el orden que establece no es casual.
Libro de imágenes y de sensaciones, tiene la particularidad de estar dividido por secciones que llevan a su vez títulos poéticos que aluden a ese Spleen al que tan bien se refiere Charles Trenet en su “Que reste-t-il de nos amours” , canción francesa casi un himno al amor, que seguramente está homenajeada en el poema De nos amours en este libro.
EL TAPIZ DE LAS HORAS de la poeta Paulina Movsichoff, la revela una vez más como sutil indagadora de la atemporalidad del alma que, en esencia, es la materia de este libro, tal como lo es de esencial también el paso de las horas.
Para terminar cito un poema que lo resume:
FRAGILIDAD DEL SUEÑO
Tablas frágiles del sueño
Isla que Dios tal vez rodee
Los portales profundos
Hora lenta en que la tarde lacia duerme
Gota a gota la vida se desliza
Gusto a polvo en la garganta.
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Paulina Movsichoff nació en Córdoba y creció en San Luis. Es egresada de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Libros publicados: Poesía , "Donde habite la luz", "Adentro hacia los nombres" "Onírisis", "Todo aire es danzable". Novela: "Fuegos encontrados" (Premio "Juan Rulfo" en México para Primera Novela, "Las Fábulas del viento", Segundo premio Municipal de Novela, "Todas íbamos a ser reinas", "La orilla del mundo", "Juan Crisóstomo Lafinur. La sensualidad de la filosofía". En cuento: "Extraño de ojos grises" y "Una mujer silenciosa". Antologías de canciones y juegos tradicionales infantiles, como adaptaciones de cuentos maravillosos argentinos para niños. Y además siete obras inéditas, entre novela, cuento, poesía y cuentos infantiles.

martes, 7 de abril de 2015

DIARIO DE UNA AUSENCIA

A veces daría no sé qué por hablarte, por correr a encontrarte como antes. No sé qué nos pasó. Por qué mentiste tanto y me dejaste prendida de esas palabras que eran sólo humo. Tal vez fui yo quien te fabriqué para rendir el último tributo al amor. Pero a veces me acuerdo de tu risa, de los lugares que recorrimos juntos y sé que no hay, no habrá olvido. Quiero decirte mil cosas pero me atropello y me quedo  con las manos vacías y el alma enganchada en la pregunta de dónde estarás, qué harás, por qué ya no has vuelto. Me parece casi imposible que hayas olvidado esas horas cuando la vida cantaba. Y me rebelo ante la idea de ya no volver a verte. En la calle las hojas caen. Recuerdo cuando viajábamos por el otoño. La vida era plácida entonces. Y yo era como una niña que acabara de descubrir el amor.

jueves, 2 de abril de 2015

JAZMÍN DEL CABO- Paulina Movsichoff



Ahora descorro las celosías del tiempo
desvisto las palabras mientras digo tu nombre.

La tierra anuda apresurados sucesos
pero fuiste antes de que la luz te amara
antes aun de que la mirada pudiera posarse sobre
tus aposentos de blancura.

Tu perfume se extendía por aquellos solitarios confines
a los que ni siquiera se atrevía a nombrar el paraíso
La eternidad era tu confidente.

Pero tan sólo te empujaba lo invisible 
para que vinieras a alumbrar mi mano

Hoy vuelvo a aprender  el día con tus pétalos
 a sentir que me abres tu secreto
para que allí resguarde mi intemperie.

  

PISADA SECRETA- Paulina Movsichoff




Siempre tropiezo contigo aunque no lo proyecte
las hebras del destino están marcadas por tu secreta pisada
y la noche descansa en la urdimbre de los desamparos.

Siempre tropiezo contigo
mientras tanto el río de las horas se fatiga
de interrogar los pájaros que aún gorjean en el árbol de las elucidaciones.

Para qué tomarme el trabajo de nombrarte, poesía,
si  ya estás aquí
si convives conmigo en mi cama de ascuas vivas
y recitamos juntas los conjuros del amor.

Porque te encierras en la Bastillas del adiós
y dejas tu tatuaje

en la piel agotada de infatigables demonios.

TU AUSENCIA- Paulina Movsichoff

TU AUSENCIA
Mis mañanas abarcan el desierto
cuando tus manos no pueden recogerlas
y mis ramas se tienden despojadas de abrazos
 
Tu risa es la puerta cerrada
detrás de la cual espero a que llegues con tu llave
a salvar mi intemperie vagabunda
A traerme tu viento
para que mi silencio pueda
atravesar la frontera del canto
Tus besos desprenden
la corteza que me dejan las semanas 
y mi nueva piel se viste de la certeza 
de que aún podemos inventar el amor
He regado tu cuerpo con mi alma 
y ahora soy un cántaro vaciado por tu ausencia

de EL TAPIZ DE LAS HORAS